miércoles, 19 de enero de 2022

YO SOY BAMBÚ (EL FINAL)

 Iba caminando cuando tropecé con algo.

—¡Ay! Pero, ¿quieres mirar por donde vas? me acabas de chutar como si fuera una pelota —se quejó un animalito.

—Disculpa, ¡no te había visto! —dije al mismo tiempo que me agachaba para verlo más de cerca.

¡Se trataba de una cochinilla!

—Bueno —dijo mientras se sacudía la tierrecilla que se le había quedado pegada al cuerpo —. ¿Se puede saber, a dónde vas por aquí chico? Este lugar es muy peligroso.

—Estoy buscando a mis amigos. ¿No los habrás visto por casualidad?

—¿Tus amigos?

—Sí, una niña morena con los ojos verdes y un niño fuerte y robusto.

—Hace mucho tiempo que nadie pasa por aquí —se subió a una piedra y se acomodó —. ¿Seguro que no sabes dónde estás?

—Pues la verdad es que no lo sé, este lugar es nuevo para mí.

—Pues entonces, bienvenido al Bosque de Cynthia, una bruja malvada. Ella, vive en un castillo con una torre muy alta, allí más adelante, justo donde terminan los árboles —dijo señalando al fondo.

—¡Tengo que ir! ¡Puede que mis amigos estén en peligro! 

—Espera un momento, ¿dónde viste por última vez a tus amigos?

—En el estanque de agua dorada.

—¿El estanque de agua dorada? —dijo la cochinilla tapándose la boca con sus manos, horrorizada —. ¡Entonces, si que están en peligro!

—¿Qué quieres decir?

—El estanque de agua dorada está hechizado por Cynthia. Todo aquel que se bañe en él, se transformará y pasará a formar parte de este mundo.

—Pero, eso no es cierto. Yo, me bañé y no me transformé.

—Tú, no. Pero, ellos sí, ¿verdad?

—Sí, eran osos pandas y se convirtieron en humanos.

—¿Ves? ¡Qué horror!

—Pero, ¿entonces porqué yo no me transformé?

—Porque, tú debes ser el "elegido" que llevamos esperando tanto tiempo. Tu misión, es romper el hechizo de Cynthia y acabar de una vez por todas con esta pesadilla.

—Pero, ¿cómo lo voy a conseguir?

—¡Ven conmigo! 

Y entonces, la seguí hasta llegar a un gran árbol. Era muy grande y estaba rodeado por unos arbustos que atravesamos y fue entonces cuando descubrí que el árbol tenía una puerta en su tronco.

Imagen de Google

¡Se abrió! Y entonces, se escuchó una voz de mujer anciana que nos invitó a entrar:

—¡Adelante!

Al entrar, descubrí una mujer muy anciana sentada en una mecedora. Tenía la piel muy arrugada, los ojos de color azul y unas gafas diminutas reposaban sobre su nariz. A su alrededor, la acompañaban una gran multitud de cochinillas.

—Has hecho muy bien en traerlo, Plixi. ¡Muchas gracias!

Después, la anciana se dirigió a mi.

—Siéntate joven.

Y así lo hice, me senté en una alfombra que había junto a sus pies.

—¿Qué te ha traído hasta aquí?

—Busco a mis amigos.

—Imagino que Plixi te habrá explicado dónde estás.

—Así es.

—Sin duda, eres el "elegido" que necesitamos para terminar con toda la malicia de Cynthia.

Me mantuve en silencio, observándola con los ojos bien abiertos. ¡Estaba fascinado! ¿Yo el "elegido"? JA... ¡imposible!

—Sé que no me crees pequeño. Pero, soy una anciana sabia y siempre digo la verdad.

—¿Y cómo se supone qué romperé el hechizo?

—Sólo tú, tienes la respuesta a eso.

—Pues vaya —me quejé.

¿Cómo iba a tener yo la respuesta si ni siquiera sabía por donde empezar?

Una vez, finalizada la conversación con la anciana, salí a pasear por aquel bosque que aguardaba tantos enigmas y misterios. Caminando, caminando llegué a un riachuelo y empecé a lanzar piedras al agua, al mismo tiempo que mi cabeza pensaba en un plan que me ayudase a lograr mi objetivo.

De pronto... ¡vi, que algo brillaba en el agua!

La curiosidad por saber de qué se trataba, me llevó a meterme en el río y hurgar hasta topar con un objeto grande y algo pesado. ¡Se trataba de un arco con flechas de diamante azul!

—Esto, ¡podrá ayudarme! —susurré y emprendí mi camino hacia el castillo de Cynthia.

Después de un largo camino, llegué a mi destino y descubrí que se trataba de un castillo no muy grande cuya torre, ¡era altísima! Me acerqué sigilosamente y pude descubrir dos hombres que vigilaban la entrada. ¡Parecían despistados! ¡Y hablaban todo el rato sin parar!


Imagen de Google

Se me ocurrió, tirar una piedra a lo lejos para engañarlos. ¡Lo conseguí! Enseguida se alejaron de la entrada para comprobar que sucedía más allá.

Al entrar, me recibió un gato gruñón. Pero, en cuanto descubrió mi arco y las flechas de diamantes azules se volvió mucho más amigable y cariñoso. Se convirtió en mi aliado y me guió hasta la cocina, dónde Cynthia preparaba nuevas pociones y hechizos maléficos. Fue entonces, cuando vi a Hikari y Lin metidos en una jaula gigante junto a la chimenea. 

Hikari, me vio enseguida y entonces yo puse mi dedo en los labios para indicarle que permaneciera en silencio. Fui avanzando poco a poco, escondiéndome tras los armarios. Pero, tuve la mala suerte de tropezar con una olla que había en el suelo.

—¿Quién anda por ahí? —preguntó malhumorada la bruja.

Y entonces, el gato corrió hacia ella y se lanzó a su cara.

—Pero, ¿qué haces, Mixi? —preguntó Cynthia mientras intentaba deshacerse del gato.

Justo en ese momento, aproveché para liberar a mis amigos. Pude abrir la puerta con una de mis flechas y después, salimos corriendo.

Cynthia ya se había quitado al gato de encima y corría tras nosotros, con su magia de bruja nos iba cerrando las puertas que aparecían en nuestro camino. Pero fuimos muy hábiles y las íbamos esquivando cogiendo otros caminos. Hasta que... ¡llegamos a una habitación sin salida!

—¡Ya os tengo! —celebró Cynthia al tiempo que hacia una carcajada espeluznante y muy desagradable.

Estábamos aterrorizados, no teníamos escapatoria. Pero entonces, a Lin se le ocurrió algo.

—¡La ventana!

¡Y lo hicimos! ¡Saltamos por la ventana!

Caímos a un pequeño foso lleno de agua. Pero, Cynthia fue más rápida y apareció volando sobre su escoba.

Echamos a correr huyendo de ella, pero cada vez estaba más cerca nuestro. Justo en ese momento, una de mis flechas se iluminó, la cogí y la puse en mi arco y entonces, apunté hacia la bruja y la lancé tan fuerte como pude.

¡Acerté y le di! 

La bruja empezó a caer en picado hacia el suelo. 

¡¡¡PLOOOM!!!

Fuimos corriendo y nos acercamos para ver que había sido de Cynthia y entonces descubrimos algo increíble.

Allí, ¡no había nadie! Sólo una cajita de madera.  La cogí, la abrí y entonces, una melodía dulce y suave salió de ella llegando a los oídos de todos los que vivían en aquel bosque.

La anciana del árbol sonrió al escuchar la melodía y comprendió que Cynthia había desaparecido, volviendo así a reinar la paz y la armonía en aquel maravilloso lugar.

Escrito por Yolanda Martínez Duarte.





7 comentarios:

  1. Ohhh k gran historia , nunca defraudas , eres una crack ...maravillosa

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Muuchas gracias por tus palabras, me emocionan😭😭😭! ¡Mi fiel lectora y apoyo incondicional! Muchos besitos😘😘

      Eliminar
  2. Ooohhh me ha encantado, qué emoción cuando la bruja quiere cogerlos, el saber si lo va a conseguir o no. Y el final me encanta, con la dulzura que caracteriza tus escritos. Enhorabuena!! De verdad que sí, tienes talento para la escritura 😊🤗🤗

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ohhhh😭😭🥰 me emocionas con tu comentario. Muchísimas gracias guapísima😍😘😘

      Eliminar
  3. Woooow que hermoso y emocionants relato. Tu progresión como escritora se ve evolucionar a països agigantados. Intriga hasta el últim parrafo. Como todas tus creacions nos mantienes en vilo hasta el final. Que bonitoooo!!! 👏👏👏☺️☺️

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Gracias guapísima por tus palabras y por valorarme tantísimo! 🥰😭😘😘 ¡Eres muy grande! Un abrazo grandote para tiiii🤗🤗😘😘

      Eliminar

LUKA, CARLOTA Y UN PROYECTO DE VIDA EN COMÚN (micro relato)

Imagen de Google Tras una semana ajetreadísima, Luka y Carlota consiguieron hacer un hueco para tomar un café juntos. El reencuentro fue de ...