jueves, 21 de octubre de 2021

LOS PENSAMIENTOS DE MAR AZUL (1ª PARTE)

El colegio Mar Azul, era un colegio aparentemente tranquilo. Pero, Leticia y Sofía sabían que no era así en absoluto.

Allí, sucedían cosas horrorosas y siempre les sucedía a los mismos niños, a los más débiles.

A sus diez años, Leticia y Sofía llevaban ya unos cuantos años estudiando en aquel colegio y no soportaban ver que Toni, Jony y Pedro se salieran siempre con la suya. Ellos, eran "los gamberrillos" del colegio y no se cansaban nunca de hacer daño y molestar a sus compañeros y por más que los profesores les alertaran y pusieran consecuencias a sus actos, nada cambiaba.

Pero un día, durante la clase de Ciencias Naturales, el profesor les explicaba que conocerían y cuidarían unas plantas llamadas Pensamientos. Así fue, como dio a cada niño una planta.


Imagen de Google

—¡Qué bonita es! —dijo enseguida Sofía.

—Sí, tienen colores muy alegres —comentó Leticia.

—Estas plantas que os acabo de repartir, las dejaremos aquí en clase cada una con vuestro nombre y os haréis responsables de ellas. Así, podremos ver como crecen y evolucionan —explicaba el profesor.

Y así lo hicieron, cada niño puso su nombre en la maceta de su planta y después, las dejaron en una repisa grande que había junto a la ventana.

Con el paso de los días...

Mientras el profesor de Ciencias Naturales se ausentó un momento para ir a hacer unas fotocopias. Toni y sus amigos aprovecharon para hacer de las suyas.

Se acercaron a Alex, que observaba su planta y le quitaba un par de hojas secas que tenía. Jony, cogió la planta y la tiró al suelo.

—Pero, ¡qué haces! —dijo Alex enfadado.

—¿Te molesta? —se burló Jony.

Alex, permaneció en silencio. No era la primera vez que se metían con él. Justo en ese momento, Toni le quitó las gafas y empezó a correr por toda la clase.

—Venga, ¡ven a buscarlas listillo! —le decía a Alex.

Éste lloraba, sus gafas eran muy importantes para él y sin ellas no era nadie.


Imagen de Google

Y justo en ese momento, Leticia se dio cuenta de algo. Su planta... ¡su planta se había iluminado y brillaba con más fuerza que nunca!

—¡Mira! —le susurró a Sofía. 

Ésta miró y se tapó la boca con su mano sorprendidísima de lo que estaban viendo sus ojos. Y entonces, miró su planta y descubrió que estaba igual.

Justo en ese momento, llegó el profesor. Toni le devolvió las gafas a Alex y luego junto a Jony fueron al despacho del director.

Cuando volvió la calma a la clase, las plantas dejaron de brillar.

—Que raro, ¿verdad? —dijo Leticia a su amiga y ésta asintió sin comprender muy bien qué era lo que había ocurrido.

Ese mismo día, mientras los niños jugaban en el recreo, Toni, Jony y Pedro volvieron a hacer de las suyas.

Esta vez, se les ocurrió hacer la traban queta a Óscar, un niño de rostro pálido y muy delgado que siempre iba mal vestido porque por lo visto la situación económica en su casa no era muy favorable. Leticia, lo adoraba por su educación e inteligencia.

—¡Dejadme en paz! —gritó Óscar tirado en el suelo.
—Eres un muerto de hambre, ahí es donde debes estar en el suelo —le gritaba Pedro.

Leticia vio un esplendor en una de las ventanas del colegio. ¡Se trataba de la clase de Ciencias Naturales!

—¡Otra vez! —susurró.
—Otra vez, ¿qué? —preguntó Sofía extrañada.
—Nada... ¡tenemos que ayudar a Óscar! —dijo Leticia y salió corriendo hacia el conflicto sin pensárselo dos veces.
—¡Basta ya! —gritó interponiéndose entre Óscar y ellos.
—Hombre, ¡mira a quién tenemos aquí! —dijo Toni en tono burlón.
—¡Aparta! —le propuso Pedro.
—No pienso apartarme —contestó ella.

Y entonces, la empujaron a ella también tirándola al suelo junto a Óscar.

—¿Alguien más quiere unirse? —preguntó Jony.

Pero, justo en ese momento llegó Sofía con el director del colegio y por fin puso fin a a aquel conflicto.

—Leticia, ¡gracias por defenderme! —dijo Óscar al mismo tiempo que se levantaban del suelo.
—No tienes porque darme las gracias. Eres muy buen chico y no te mereces que te hagan esto.

Y así proseguía el día a día en aquel colegio. Conflictos y más conflictos y todo por culpa de aquellos tres niños que eran incapaces de respetar a nadie y de cumplir con las normas del colegio.

Y por ello, porque eran incapaces de comportarse correctamente, fueron expulsados del colegio durante quince días. 
Quince días, en los que reinó la paz en el colegio Mar Azul. Los niños estaban alegres y felices y los Pensamientos habían crecido muchísimo en estos días.

Escrito por: Yolanda Martínez Duarte.
 


6 comentarios:

  1. Que maravilla de escrito, real y por desgracia demasiado habitual. Sigue así preciosa crack, deleitándonos con tus variados y hermosos relatos. 👏👏

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    1. ¡Hola Rosa! Me alegra muchísimo saber que te ha gustado. ¡Gracias una vez más por tu apoyo incondicional! Mañana publicaré la segunda parte, espero que también te guste. ¡Un abrazo!

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  2. Podría decirse que está basado en hechos reales. Desgraciadamente esto está a la orden de día y lo has reflejado muy bien en el relato

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    1. Totalmente de acuerdo contigo Eli😔 ¡muchísimas gracias por tu comentario y aportación! Un abrazo.

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  3. A mi hijo le ha encantado, me pregunta por brillan los pensamientos 🤭🤭 estas plantas nos tienen intrigados. ¡Vamos a por la 2a parte!

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    1. ¡Hola Verónica! Como me alegra saber que a tu hijo le ha gustado el cuento y que tenga esa curiosidad taaan bonita🥰 durante el día de hoy publicaré la 3a PARTE Y EL FINAL. Espero que os guste mucho😊😘😘

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